viernes, 8 de mayo de 2009

_Será que soy rara..._



...a veces pienso que no esta el mar en medio

y que se puede viajar en bicicleta a ti...

C_ Felipe.



"the dream is over"
Beatles
Las heridas no me curan con normalidad, es evidente que estoy baja de algún intracorporal caldo de cultivo. Tres años continuos la misma herida en el mismo dedo, no se, no lo considero serio a decir verdad.
Esta vez ha tardado un mes de más en hacer su aparición mi herida favorita, pero inexorablemente como cada año, ha vuelto ha renacer en la esquina de mi mas obeso dedo.
Nunca fui normal para nada.


Tal vez esa sea una buena crónica silenciosa en mi epitafio:
"Aquí yace la mujer a la que se le reveló hasta la ceniza"

El leve y sencillo vuelo hacia el cenicero y su inminente caída dentro es para mi un imposible. La ceniza en un magistral aleteo y, cuando mas cerca parece de posarse, hace un quiebro de cadera y se ve estrellada sobre cualquier mesa (hecho verídico y constante con testigos de cargo a disposición de quien lo dude).
Muchas veces me pregunto el por qué la mayoría de las farolas de mi ciudad me miran con ojos de auténtico deseo. Será porque todas llevan un chichón mío al llegar aproximadamente al 1,20. Menos mal que ya he crecido un poco mas y las miro cara a cara, ahora no se tropiezan tan a menudo conmigo, porque doy fe de que eran ellas. Casi interpongo una denuncia por agresión constante en el ayuntamiento.
Tampoco tengo idea de cómo fue a parar el flan de seis huevos, hecho con tanto cariño por mi hermana, contra todos los recovecos de mi cocina: suelo, techo y paredes. Ni tampoco se que diantres hacía yo tendida allí bocarriba y con el pelo lleno de trocitos de porcelana, pedacitos de caramelo y restos de nata.
Cuentan los testigos que fue un "Aurresku" que rozó la perfección, el golpe en la sien sólo acabó en un buen susto. A mi entender mi conciencia se deshizo de mi por un rato, no se lo tendré en cuenta, procuro no ser vengativa.
Será la costumbre pero ya nadie se asusta de mis romances con el duro elemento.

No es normal que después de hacerme trizas la rodilla una mañana fregando sólo sintiese dolor la tarde posterior. Aún oigo a la traumatóloga de urgencias decir sin parar: es imposible te acabas de caer, y yo la decía : que no que me caí ayer.
No pudo creer que andase todo un día con la rodilla destrozada y sin sentir dolor alguno, juraba y perjuraba que esa avería había sido aquella tarde, y así renegó todo el tiempo que estuvo escayolándome.



Es que soy muy rara, mucho.

12 comentarios:

PanteraNegra dijo...

Vale, cada día me siento mejor cuando os leo, me voy sintiendo menos rara, menos bicho. Tengo muchas cosas en común con Cata, pero ahora veo que también contigo. Yo soy la "PUPAS", eso si, mi cuerpo ha generado una autodefensa extraordinaria, sano como Lobezno, pero los chichones, roces, cortaduras...no me los quita nadie, y pasar por le medio del marco de una puerta, tampoco. Yo lo achaco a mi dislepsia, pero va a ser que soy torpe de huevos...jajaja.

Anónimo dijo...

Hola Pinochito:

Yo si que soy rara, ya ves, hasta hace poco y a "cierta edad que una ya tiene, no he aprendido a poner canciones, por ejemplo, o a "entender" a la gente, aún con la experiencia de los años.Gracias a tí aprendí algo más.

Respecto a los golpes, y trompazos físicos, me llevo la palma. Ahora no tanto, pero me suena terriblemente lo de tu hermana y la comida por el suelo. Y lo increible, a mi también me dio mi hermana con una piedra en la cabeza, y luego la muy ..., puso cara de que no había pasado nada. Y yo con el chichón y el golpe. Y encima me la cargué yo por mi "fama" de estar metida en todos esos lios.
En casa tenían miedo de que llegara del colegio o la calle. A ver como aparecía ese día. Tengo partidas las cejas por dos partes cada una de ellas, y el labio una, sin contar las cicatrices de las piernas y rodillas.

A mi no me pareces rara, me pareces encantadora, maja, supercariñosa conmigo, lo cual agradezco siempre. En fin, una chica estupenda y muy alta por lo cual ahora ya no se tropieza con las farolas. Me gusta, lo que has dicho: "ahora las miro de frente", jeje.

Un beso de corazón de

BRAVISSIMA

Espe dijo...

Nena, si eres rara, ya somos dos... Me he sentido identificada en algunas de las situaciones que has descrito. Yo también me he hecho millones de veces esta pregunta y puede que sea que sí, puede que seamos raras, pero yo me atrevería a decir que en vez de raras, ¡somos diferentes! (Suena mejor ¿no?)
Besos primor.

Ana Márquez dijo...

"No me siento laj pienna" Rambo

Ni yo, y, por lo q veo, tú tampoco... Nos basta q sintamos el corazón :-) Besitos, precios

Ana Márquez dijo...

Precios...a

Se lleva mal conmigo este teclado, y no sé por qué, sólo lo martilleo incesantemente, igual eso le molesta al pobre

Angelosa dijo...

Tú rara, no mi niña, los raros son los demas, ya me gustaria a mi tener un poco de tus rarezas, sobre todo a la hora de escribir, que te sale solito. Cuidate mucho preciosa.

Un abrazote

Patricia Fernández Miranda dijo...

Alégrate de ser rara, es mejor que ser común.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Pues mira, yo para eso de los golpes tengo suerte. Nuna me he escayolado ni operado de nada... Toquemos madera!!
Mi hermana la pobre es la pupas... Si llueve, se resbala y escayola que te crio. Que pilla una piedra?? pues al suelo y escayola que te crío. Que hay un virus de la barriga?? Pues a vomitar y con diarrea... Y así con todo.

Natalia

Patricia Fernández Miranda dijo...

Virginia tenía eso y mucho mas que un corazón dentro del pecho.
Gracias y buenas noches.

ion-laos dijo...

A ver si va a ser que te gusta la Panto que es gafe de narices!
Te pareces a mi hijo, que se lleva los golpes de todo el mundo mundial y lo rompe todo,que eres distinta niña,que ser igual que los demas, es un rollo,miralo por el lado bueno...si lo tiene,jajajaja, un besazo,que eso son rachas, ya veras cómo pasa

Catalina dijo...

Jajajaja, vamos, que andas to el día por los suelos...¡que fuerte, ma!

Ayss me he reído imaginando el flan volando, a la doctora comentando con sus colegas que le había escayolado la rodilla a una loca, y a ti denunciando a las farolas...jajaja.

Claro que eres rara, espero que no te hayas dado cuenta ahora...yo lo sabía desde hace mucho. Y me gustas así, por los suelos, cayéndote y vendándote, tropezándote y escayolándote. Me gusta to de ti, ma. Y todo eso sin beber alcohol, que tiene más mérito, jajaja.

Besos
Cata

Pinocho dijo...

...soy rara ¿y lo veis normal? Amén Jesús!!!

Que ya tengo una edad jajjajajaj....

Os saludo desde el suelo a todas. Muackis y gracias por veniros a levantarme.