lunes, 21 de mayo de 2012

_espera_



Te tenía que haber destrozado la boca a besos, haberme llevado, entre las uñas, el recado del último latido que susurrabas antes de recostarme.


 

No deberías saber que te amo. 
porque se vuelven incansables las cinturas
y las sudadas paredes
se alzan los refajos
en el desesperado arriete
del comienzo de un mordisco
aclaratorio sobre el cuello.

No recuerdo cuando estabas
y amamantaba glaciales cantinelas.

Espérame al costado de la duda
donde se abren las carnes sin ropa
y la punta de mi pecho
se hace una con tu labio.
Espera,

espera...

espera.

A los otros, a los pulcros llenos de fe y desarraigados, les da por el mismísimo alma la premura carnal y, la facilidad con las que nos arrancamos los brazos del cuerpo sólo por notar puro y tierno amor.


No esperes
la sombra de la noche 
hoy no hace pie
y nadie teme que 
...de placer me ahogues.



...y eso


sábado, 12 de mayo de 2012



Entonces me ahogué sin tu palabra,
y nunca más supe replicar a un silencio.

Ahora dedico cada miembro a no resbalar
y sujeto tus huellas a la mesa
y, los clavos de la tarima que aún te crujen,
para que no huya la casa tras de ti
cada diecisiete segundos exactos.

Una sola vez apreté los dientes,
una sola vez.
Mientras, 
tamborileaban mis dedos en tu rodilla,
y te juré amor eterno
justo cuando no mirabas.


...y eso



...Si te cuento esta verdad

No puedo explicar, con un puñado de palabras, este amplio periodo en el que he olvidado hasta la palabra impresa.
Imposible deciros todo lo que me ha sucedido. No he tenido más que la necesidad de acariciar cada momento como lo he hecho.
Ser Madre, Madre con mayúsculas, apurar cada minuto de cada día sólo para volver a tomarla entre mis brazos y sentir que ya no hay nada, nada más.

Vuelvo despacito a mi misma, como si jamás hubiese desaparecido.
Con el cuerpo aún entumecido de ternura.


...Aquí estoy.


...y eso