miércoles, 4 de agosto de 2010

_si_lencio_


http://www.mcshuibhne.com/wp-content/uploads/2009/12/silencio-buenos.jpg

Para volverse roca no es necesario ni respirar, a veces sólo basta caerse de bruces contra una caricia y sentir que parece un golpe.

Es lo extraño de la noche que me sana estas ojeras. O lo de menos si echo en falta el bamboleo de tus sueños en mi izquierda.
Vete lejos que desnudaré mis piernas y reventaré las ganas que me toquen de frente.
Ve, ve lejos que en unas horas desnudaré mi escote altanero para la baba del fondo y no preguntes el por qué: porque no lo hay.

Es la resbalosa cara de calor o la mejilla sonrojada de las duda, o, el sentir, que aún late la mujer que nace dentro.

Quieto ve, vete más lejos. Aún me estoy encantando de conocer.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola mi querida Pinochito.
Espero que estés estupendamente (seguro que si).
Que sepas que te echo de menos…

Te mando un fuerte abrazo.

Menta.

Francesc Cornadó dijo...

Huida

Vete, vete a una plaza secreta,
a un lugar recóndito,
a resguardo de caricias,
al abrigo de los amores afilados,
donde ningún beso te alcance,
donde ningún puñal te marcará la piel.

La lealtad de bronce
es un peligro permanente.


traducción del catalán de
un poema de DOBLE TALL

Francesc Cornadó

pepe montero dijo...

Y ole, ole por esa calma que colma.

PanteraNegra dijo...

Mi querida Pinocho, no me canso de entrar en tu casa y leerte. Al igual que menta, te echo de menos.

Patricia Fernández Miranda dijo...

No te vayas todavía, aún hay muchas caricias por repartir, tatuajes de sol y hielo. Entre tu distancia y mi distancia se extiende un hilo invisible... no rompas el encanto...
(Escrito para tí, ahora, viernes de noche, cuando aún no duermen los duendes)

Pinocho dijo...

...sois mi impulso, mi aire...

Gracias, no sabeís el bién que haceis..